En la cruzada para cortar las emisiones globales de de CO2 , tenemos la mirada a las centrales eléctricas, los coches, y la fabricación. Hoy en día, nuestros materiales de construcción se también ganaron la atención, y investigadores procedentes de Kansas de la Universidad Estatal han desarrollado un tipo de concreto hecho a partir de residuos biocombustibles que tiene una huella de de carbono más bajo que el concreto convencional. El mundo utiliza cerca de 7 mil millones de metros cúbicos de la mezcla de cada año, que lo convierte en el material industrial más utilizado después del agua.
Tomando ventaja de los subproductos a partir de la producción de biocombustibles tal como el rastrojo de maíz, la paja de trigo, el y de la paja de arroz, el equipo fue capaz de crear un hormigón más fuerte.
El hormigón tradicional se fue para arriba en costo por el agregado, el agua, y cemento Portland . Los los investigadores de Kansas de la Universidad Estatal fueron capaces de reemplazar el 20 por ciento de los cemento portland con subproductos procedentes de etanol celulósico, un proceso el cual utiliza materias no comestibles tal como astillas de madera, paja de trigo, y otro de los residuos agrícolas.
Viendo como las cuentas normales de concretos para el 3 a 8 por ciento de las emisiones globales de de CO2, la fórmula recién-desarrollados podrían no sólo ayudar a cortar los gases de efecto invernadero que contribuyen al calentamiento global, pero también podría ayudar a encontrar a un camino para los residuos biocombustible una vez que la industria se expanda.
Los resultados de las investigaciones del grupo han sido publicados en la Cumbre de 2013 Capitol la Investigación de Posgrado en Topeka, y el equipo fue galardonado con una subvención de $ 210.000 desde la Fundación Nacional de la Ciencia .
fuente: inhabitat
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